
Una señora blanca, de cerca de 50 años, se sienta junto a un negro. Visiblemente molesta llama a la azafata.
La azafata: ‘’¿cual es su problema señora?’’
La señora: ‘’¿pero, es que no lo ve? ¡me han puesto al lado de un negro!, y no soporto estar junto a uno de estos seres tan desagradables, así me ubíquenme en otro lugar, por favor’’
La azafata: ‘’cálmese, casi todos los puestos de este vuelo están ocupados, pero iré a ver si hay algún asiento libre’’
La azafata se aleja y al cabo de algunos minutos vuelve y dice: ‘’señora, tal y como pensaba, no hay ningún asiento libre en clase económica. He hablado con el comandante que me ha confirmado que no hay tampoco puestos libres en la clase ejecutiva, pero todavía tenemos un puesto libre en primera clase’’
Y antes que la señora pudiera hacer el más mínimo comentario, la azafata continuó: ‘’es completamente inusual en nuestra compañía permitir a un pasajero de clase económica sentarse en primera clase, pero vistas las circunstancias el comandante piensa que sería escandaloso obligar a alguien a sentarse al lado de una persona así de repugnante...’’
La azafata va hacia el negro y le dice: ‘’así que, señor, si lo desea, tome su equipaje de mano, que lo espera un asiento en primera clase'’
Todos los pasajeros que asistían a la escena, se levantaron y comenzaron a aplaudir la decisión de la azafata y del comandante.
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